Ingredientes:
1 kg. de fresas
1 kg. de azucar 1 limón exprimido
Lavar las fresas, deshuesarlas y secarlas sobre papel absorbente.
En una cazuela amplia para confituras, poner la fruta alternándola a capas con el azúcar, la última capa debe ser de azúcar. Añadir el zumo de limón, cubrir con un paño limpio y dejar reposar durante 12 horas o hasta que el azúcar se disuelva y la fruta haya soltado jugo.
Poner a fuego lento y llevar a ebullición, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera. Cocer durante media hora aproximadamente, removiendo a menudo para que no se agarre. Una vez pasada esa hora, retiramos la espuma (si te sale) y colocamos en tarros de cristal.
La mermelada a cada persona le gusta de una forma, por eso debemos personalizarla a nuestro gusto, por ejemplo, la fresa es una fruta muy dulce y por lo tanto si no te gusta la mermelada dulce, debes echar menos azúcar. También es importante el tema de la textura, a mi no me gusta encontrarme trozos, así que una vez que esta cociendo y lleva 20 min, si veo que no se ha desecho la fruta, le paso un poco la batidora y la dejo sin los grumos de fruta. Con el espesor pasa lo mismo, media hora es lo adecuado, pero si te gusta más espesa tienes que cocer más tiempo, pero ten en cuenta que una vez que se enfría se espesa bastante más. Hay que tener cuidad no se quede como una piedra.
Lo suyo sería conservar en frascos esterilizados y cerrados herméticamente, pero eso ya es otra historia y ya lo explicaré otro día.
1 kg. de fresas
1 kg. de azucar 1 limón exprimido
Lavar las fresas, deshuesarlas y secarlas sobre papel absorbente.
En una cazuela amplia para confituras, poner la fruta alternándola a capas con el azúcar, la última capa debe ser de azúcar. Añadir el zumo de limón, cubrir con un paño limpio y dejar reposar durante 12 horas o hasta que el azúcar se disuelva y la fruta haya soltado jugo.
Poner a fuego lento y llevar a ebullición, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera. Cocer durante media hora aproximadamente, removiendo a menudo para que no se agarre. Una vez pasada esa hora, retiramos la espuma (si te sale) y colocamos en tarros de cristal.
La mermelada a cada persona le gusta de una forma, por eso debemos personalizarla a nuestro gusto, por ejemplo, la fresa es una fruta muy dulce y por lo tanto si no te gusta la mermelada dulce, debes echar menos azúcar. También es importante el tema de la textura, a mi no me gusta encontrarme trozos, así que una vez que esta cociendo y lleva 20 min, si veo que no se ha desecho la fruta, le paso un poco la batidora y la dejo sin los grumos de fruta. Con el espesor pasa lo mismo, media hora es lo adecuado, pero si te gusta más espesa tienes que cocer más tiempo, pero ten en cuenta que una vez que se enfría se espesa bastante más. Hay que tener cuidad no se quede como una piedra.
Lo suyo sería conservar en frascos esterilizados y cerrados herméticamente, pero eso ya es otra historia y ya lo explicaré otro día.
Todas las mermeladas no se realizan de esta manera, pero si de forma muy similar, la dosificación es la misma, 1 kg de azucar por 1 kg de fruta, pero si la fruta no es muy dulce, no hace falta el limón (ejem: Naranja) y si la fruta no suelta jugo, tampoco hace falta macerar en azucar (ejem: Melocotón)
1 comentario:
Riquísima.
Veo que la página avanza a buen ritmo ;)
Ánimo!
A.
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